Causa de ello, es la tristeza que los invade la tarde del domingo, llamada "neurosis dominical" que anticipa la "tristeza del lunes". Quizás también es la causa de que el mayor número de suicidios ocurre la noche del domingo al lunes.
El 70% de las personas no se siente satisfecho con su
trabajo y entre otras causas se encuentra:
·
La poca y a veces nula comprensión del sentido de lo
que hacen, se dice la falta de perspectiva (No
sé de dónde viene lo que hago ni a dónde va lo que hago, ¿qué sentido tiene lo
que hago?)
·
La relación con el jefe, especialmente aquellos que
creen que están ahí sólo para que los individuos cumplan con la tarea, sin
importar sus problemas.
·
La relación con los compañeros de trabajo, sobre todo
aquellos cuyas principales características son: agresivos, competitivos y poco
solidarios.
Entonces, la tarea, los jefes y los compañeros, hacen
que miles de personas no encuentren sentido a lo que hacen, las dos variables:
la tarea y la relación, se encuentran bastante deterioradas y esto repercute
invariablemente en la calidad de vida de las personas en su trabajo.
Partiendo de la base de que todas las personas
queremos hacer algo o ser alguien en la vida, nos orientamos a prepararnos y
capacitarnos estudiando una carrera profesional o técnica, cuando elegimos
aquello a lo que queremos dedicarnos ponemos en práctica algunos fundamentos de
la logoterapia:
·
"La libertad de voluntad" somos libres de
elegir lo que queremos para nuestra vida a pesar de condicionamientos de origen
biológico, psicológico y social, tomando una actitud libre ante ellos.
·
"La voluntad en busca de un sentido" todos
aquellos esfuerzos por estudiar, capacitarnos y prepararnos, son parte de
nuestros actos intencionales y constituyen nuestra fuerza, nuestra motivación.
La libertad para ejercer nuestra voluntad, nos permite establecer la jerarquía
de nuestros valores. En el caso contrario, donde las personas no eligen
libremente a lo que quieren dedicarse, corren el riesgo de entrar en un
conflicto de valores. El aceptar valores introyectados, sin conciencia crítica,
puede resultar en experiencias desagradables que no tengan sentido y que
provoquen frustración, por ejemplo, estudiar algo por imposición o para dar
gusto a otros.
·
"El sentido de la vida" En la búsqueda de lo
que nos es significativo y valioso encontramos sentido.
Una vez que decidimos prepararnos o capacitarnos, el
siguiente reto es iniciar nuestra vida productiva para generar recursos que nos
permitan sobrevivir. El trabajo es el medio, pero tiene tanta importancia que
le dedicamos casi un tercio de nuestra vida, considerando que cada día hábil
trabajamos alrededor de ocho horas.
El medio generalizado para ofrecer trabajo a través
del empleo, es la empresa. La razón principal de existir de una empresa es que
puedan llevarse a cabo actividades que las personas de forma individual no
podríamos, sin embargo, el elemento básico de toda empresa es la persona. Las
empresas, de manera general, puede considerarse que tienen tres tipos de
trabajadores que realizan trabajos a diferente nivel:
Los
que realizan trabajos de detalle como personal obrero, técnico o de oficina.
Los
que desempeñan trabajos de coordinación, como supervisores, jefes o gerentes.
Los
que tienen a su cargo la Dirección de la empresa, cuya principal
responsabilidad es conducir el destino de la misma hacia el cumplimiento de su
misión y objetivos.
Aspirar a tener empleo en cualquiera de los tres
niveles arriba mencionados, depende de nuestra preparación, capacidad,
aptitudes y orientación; en los tres se puede hallar sentido, mientras más alto
el nivel, los retos y oportunidades de encontrar sentido son mayores.
El sentido se puede encontrar a través de tres de los valores identificados por Viktor Frankl:
·
De creación: al experimentar que somos capaces de
ofrecer algo al mundo a través de nuestro trabajo.
·
De experiencia: al encontrarnos con otros seres
humanos y descubrir en ellos su unicidad, su irrepetibilidad y su potencial.
·
De actitud, al vernos imposibilitados de encontrar y
descubrir sentido por los caminos de los valores de creación y experiencia en
las situaciones inevitables.
Visto el trabajo como un medio y no como un fin, dos
de los objetivos que buscamos en él es tener un medio de subsistencia y de
autorrealización, utilizamos nuestra voluntad para dirigirlo a un fin, que es
el sentido y lo que le da sentido al trabajo, es el modo como lo realizamos.
Hacer valer nuestro trabajo es algo personal y específico que aporta un
carácter único e insustituible a nuestra existencia y con ello un sentido a la
vida.
Buscar y encontrar sentido en el trabajo, tiene dos
niveles de responsabilidad: el de la persona y el de la empresa.
Por un lado, la responsabilidad de la persona es
comprender en qué consiste el trabajo, en realizarlo y en la forma en que lo
hace. Por su parte, el nivel de responsabilidad de la empresa, corresponde al
nivel Directivo, quienes, con orientación logoterapéutica, en su descubrimiento
de personas únicas e irrepetibles, pueden tener claro cómo encontrar sentido a
su trabajo y lograr mejores resultados, que es precisamente de lo que vive la
empresa.
En el trabajo en la empresa es normal que las personas
vivan un mínimo de tensión, la búsqueda de sentido la implica. La tensión
vitaliza la búsqueda y hace que todo su ser se ponga en marcha para realizar su
trabajo. La tensión es necesaria como el arco del violinista, si tiene poca
tensión no suena y si tiene mucha se rompe. El exceso de tensión, genera
estrés, la orientación positiva o negativa del estrés, depende del nivel de
tolerancia de la persona. Una manera de reaccionar ante el estrés, es tomar
como escape la apatía, el desgano, el
alcoholismo y abuso de drogas, lo que lleva a que las personas experimenten un
vacío existencial. Haciendo que se presente lo que Viktor Frankl llamó la
tríada neurótica: la adicción, la agresión y la depresión.
La persona, el trabajo y la empresa, forman parte de
la vida y a manera que cada persona pueda elegir libremente a qué dedicarse y
que en ello pueda realizarse, entonces es que el trabajo tiene sentido.
Al encontrar sentido en lo que hace, la persona
experimenta un sentimiento más intenso de trabajar y de sentirse vivo, con esa
visión, se siente más eficiente, con gran soltura, espontaneidad, sentido del
humor y optimismo en todo lo que realiza.
“Por aquí y por allá, existen personas
que en las organizaciones con tendencia a la globalización, economía de
mercado, resultados a como dé lugar, presiones, estrés, úlceras, divorcios e
infartos, aún mantienen la esperanza de ser cocreadores junto con Dios de un
mundo mejor.”
(Díaz Ibáñez Jesús "La empresa como
camino espiritual")
No hay comentarios.:
Publicar un comentario